La organización para el aprovechamiento de recursos naturales en el país, siempre va de la mano con las legislaciones vigentes en ese momento. En la segunda mitad del siglo XIX fue la aplicación de las leyes de reforma agraria, que modificaron radicalmente los derechos de acceso a la tierra y en general a los recursos naturales. Se privatizaron las tierras comunales y nacionales y se dieron concesiones a inversionistas extranjeros y nacionales para talar madera, construir caminos y abrir minas. En esa época no se estableció ninguna estructura reguladora y las extracciones se basaron en un claro estilo de “minería forestal” en algunas de las regiones forestales más ricas del país, entre ellas Hidalgo. La población rural contribuyó también a la deforestación al practicar la agricultura itinerante y la extracción de leña.
En la Constitución de 1917, se incorporó un nuevo sistema de propiedad que estableció la propiedad plena de la nación sobre las tierras y aguas comprendidas dentro de su territorio, lo que hace que la propiedad privada sea una concesión de la nación al transmitir su dominio directo a los particulares, conservando la facultad de recuperarlo en cualquier momento. En este marco, se decretó la Ley Forestal de 1926 que tuvo la misión de reglamentar el dominio directo de la nación sobre los recursos forestales. Esta Ley establecía el carácter inalienable de los bosques comunales y requería que los aprovechamientos forestales fueran exclusivamente desarrollados por cooperativas ejidales. Sin embargo, las dotaciones forestales no se acompañaron de apoyo técnico y financiero, por lo que eran empresas privadas las que realizaban las operaciones forestales.
La Ley Forestal de 1940 fue la reinserción del mecanismo de concesiones forestales en favor de grandes empresas privadas nacionales y extranjeras, que operaban en las denominadas Unidades Industriales de Explotación Forestal. Aproximadamente a nivel nacional 30 concesiones forestales fueron otorgadas, con un promedio de 400.000 hectáreas cada una. La duración de las concesiones era de 25 años en promedio, aunque los plazos estipulados llegaron hasta 60 años.
En 1998 la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales y Pesca, creo el Programa de Desarrollo Forestal (PRODEFOR) programa de subsidios para propietarios del bosque el cual clasifico a los productores forestales por tipo de organización.
a) Productores potenciales: Aquellos que actualmente se encuentran sin realizar el aprovechamiento forestal. Respecto a este tipo de productores, es de gran importancia de las instituciones de los diferentes órdenes de gobierno, incluirlos en el manejo forestal sustentable, ya que al hacerlo se elevan las posibilidades de mantener el recurso forestal y se aumenta el número de superficie ordenada forestalmente hablando.
b) Productores que venden en pie: Son los que aprovechan sus bosques mediante contrato de compra-venta, sin que el propietario o poseedor participe en alguna fase del aprovechamiento. Dentro de los productores forestales con aprovechamiento forestal, este tipo de productores se presentan en menor proporción en comparación con los demás. Esto a consecuencia de que la mayoría de los permisionarios forestales ven a los aprovechamientos forestales como actividad económica principal. Considerando lo anterior, son pocos los permisionarios que no realizan las actividades de extracción.
c) Productores de materias primas forestales: Cuentan con aprovechamientos autorizados y conducen el aprovechamiento de sus recursos naturales transformándolos en materias primas forestales (trozo, tabla, leña, hojas, pencas etc.). Este tipo de productores son los que se presentan con regularidad en el territorio de la UMAFOR, ya que la mayoría de los núcleos agrarios se encargan de realizar las actividades de extracción, al igual que los pequeños propietarios, en el primer caso se recibe un ingreso económico por estas actividades.
d) Productores con capacidad de transformación y comercialización: Disponen de infraestructura para transformar las materias primas forestales, obtener producto industrializado y realizar directamente la comercialización.
Las organizaciones creadas a partir de una legislación, en un alto porcentaje de las ocasiones se dejan de operar cuando los gobiernos dejan de incentivarlas, derivado por que en su origen son creadas con un trasfondo políticos, dejando de lado el desarrollo de una sustentabilidad. Caso contrario a las organizaciones que se crean con fines productivos, para resolver problemáticas de producción o comercio, creando a través del tiempo cadenas productivas muy específicas y altamente rentables.
La tendencia actual de los dueños de terrenos forestales, es a combinar el aprovechamiento de recursos maderables y no maderables en un mismo predio, así como a incorporar la protección y uso de servicios ambientales (agua, paisaje, etc.), motivo por el cual la creación de organización sin fines productivos no es atractiva. Las instancias gubernamentales deberán enfocar esfuerzos en encausar a las organizaciones ya existentes al cumplimiento de las legislaciones vigentes y la formación de cadenas productivas especificas.
Dentro de los procesos de gestión de una empresa es muy importante adelantar procesos de PLANEACIÓN U ORGANIZACIÓN DE LA PRODUCCIÓN. Con esto se busca ganar eficiencia y cumplir con las metas propuestas al distribuir las actividades a través del tiempo
Para iniciar el trabajo de programación debemos siempre tener en cuenta como se hará el trabajo, cuando se hará, la ubicación donde se hará y por último con quien se cuenta para el trabajo.
Luego de haber determinado lo anterior se debe entrar al trabajo de materializar la planeación mediante un tablero o gráfico visible para todos los interesados.
Existe un método muy popular para organizar la planeación mediante gráficos que es llamado GRAFICO DE GANTT que es una herramienta de programación y control de las actividades que permite ver sus avances en el tiempo.
Para elaborar un Gráfico de Gantt debemos tener en cuenta las Actividades A Realizar, es decir las partes del producto o el producto completo, o simplemente operaciones aisladas. Estas actividades las ubicaremos en las líneas horizontales. El otro elemento para tener en cuenta es El Tiempo, el cual podemos clasificarlo en días semanas años etc. según la necesidad de la actividad. Dependiendo de cuánto tiempo se dedicara se indicará con un trazo horizontal en el gráfico.
Un detalle importante para tener en cuenta es que al momento de elaborar el gráfico tengamos una convención reconocida para indicar cuando comienza y cuando termina una actividad, ya que el solo trazo horizontal del que se hablo anteriormente puede no ser muy claro en este sentido.
Al respecto anterior se pueden colocar unas marcas en forma de escuadra al principio y al final de la línea horizontal, o cualquier otra figura que denote claramente el límite en el tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario